De acuerdo a la RAE (Real Academia de la Lengua Española), soporte significa: apoyo o sostén. Características que se necesitan para la gran mayoría de las actividades humanas, sobre todo cuando estas son complicadas y necesitas una base sólida para completar la tarea o actividad que se esté ejecutando.
Normalmente estos sostenes o soportes, ayudan a dar otra dimensión sobre las cosas. Brindan seguridad, confianza y sirven como un trampolín para continuar en un camino ascendente, aunque en ocasiones recurras frecuentemente a este para tomar aire y continuar con tu trabajo.
Esto es precisamente lo que provee Lucas Leiva en la media cancha de Merseyside. Un jugador callado, que no genera mucho ruido y que tampoco llama mucho la atención por el rol que ejecuta en la cintura del campo. El cual, aunque no parezca llamativo o crucial para el óptimo funcionamiento del Liverpool; ciertamente lo es. Ya que Leiva es el que marca el tiempo, ritmo y espacio con el cual se jugará. Y es que el brasileño se ha vuelto el comandante silencioso de los Reds. Sin él, Brendan Rodgers navegaría sin sentido, ritmo y carecería de equilibrio en el bloque que comanda.
La labor del 21 es fundamental para el Liverpool. Es la salida y escaparate del equipo cuando este decide salir jugando desde el fondo. Es la primera opción para hacer esto, inclusive por delante el mítico Steven Gerrard. Ya con el balón en los pies, tiene el criterio suficiente para repartir juego. Haciéndolo de manera fácil y practica. Normalmente con uno o dos toques para darle continuidad y soltura a la jugada. Posteriormente, ya que ha proyectado a sus compañeros, continúa moviéndose en diagonal a la jugada. Lo que le permite estar siempre bien colocado y al servicio del compañero por si este requiere apoyarse y soltar el balón. Y con esto, empezar a crear la siguiente jugada.
Leiva cumple la función de equilibrio y desahogo del equipo. Ya que siempre funge como un referente de apoyo y para buscar otro cause cuando el camino está cerrado. Problema que logra resolver abriendo ese camino con pases en profundidad y filtrados, o bien, encontrando nuevos horizontes con la visión y lectura de juego que logra evidenciar semana a semana. Virtud que lo ha convertido en un habitual dentro del once titular de los Reds, desde que regresó de su lesión.
Brendan Rodgers forma con tres mediocentros, siendo Lucas el más atrasado, clavado y “atado”. Esto permite que tanto Gerrard como Joe Allen, tengan más libertad y movilidad hacia el frente. Teniendo la seguridad y confianza de que hay un soporte sólido jugando por detrás de ellos, y con el cual siempre podrán recular y usar como trampolín para lograr otra dimensión de juego.
Lucas Leiva se ha vuelto imprescindible en el esquema del Liverpool. Tanto es así, que mucha gente lo compara con Michael Carrick, Gareth Barry o el propio Sergio Busquets, debido a la labor silenciosa pero crucial para el correcto funcionamiento de Anfield Road.